Imagina por un momento que eres el responsable de administrar la logística para las elecciones de Lok Sabha en la India durante este 2024. Estarías supervisando a 15 millones de trabajadores electorales distribuidos en 1.050.000 centros de votación para facilitar el voto de 978 millones de votantes. ¡Una tarea bastante desafiante, ¿cierto?

A pesar de lo intimidante que puedan sonar las elecciones en India, lo cierto es que todos los Órganos de Administración Electoral (OAE) encargados de la logística y las operaciones se enfrentan a desafíos muy similares durante una elección. La variedad de tareas y consideraciones que las OAE deben abordar es notablemente uniforme, ya sea que estén imprimiendo 1,2 mil millones de papeletas en Indonesia, registrando votantes en las empinadas montañas de Bolivia, desplegando 110.000 máquinas de votación entre las 7,000 islas del archipiélago filipino, o facilitando un período de votación extendido de 11 días en Los Ángeles.

Afortunadamente para las autoridades electorales, la aparición de tecnologías como las herramientas de Business Intelligence (BI), los cuadernos electrónicos de votación (e-Poll books) y, más recientemente, la inteligencia artificial (IA), pone en sus manos soluciones que aumentan sustancialmente sus capacidades de supervisión y gestión.

Peter Drucker, considerado el ‘padre de la gestión moderna’, acuñó una frase notable: “Si no puedes medirlo, no puedes mejorarlo”. Estas palabras subrayan la importancia de la medición en el proceso de gestión y mejora de cualquier proceso. Las OAE están tomando esto en serio, aprovechando una serie de soluciones tecnológicas para monitorear la logística y las operaciones, y gestionar de cerca los indicadores clave de rendimiento (KPI).

El BI se beneficia de procesos y aplicaciones específicamente diseñados para el análisis de datos. Esto facilita la transformación de un amplio conjunto de datos en información útil y práctica, permitiendo a las OAE tomar decisiones bien fundamentadas. Un ejemplo de esto es el despliegue de aproximadamente 22.000 dispositivos electorales, incluyendo máquinas de votación, en numerosos centros de votación del condado de Los Ángeles; un desafío logístico que la tecnología de BI resuelve hábilmente. En Los Ángeles, el BI se ha vuelto esencial para la gestión en tiempo real del personal y el seguimiento de los equipos, desde el despacho inicial en el almacén hasta su despliegue estratégico en los centros de votación, configuración y finalmente, repliegue.

En Filipinas, un archipiélago compuesto por 7.000 islas, las herramientas de BI se han vuelto indispensable para el monitoreo logístico. Al facilitar el seguimiento minucioso de una variedad amplia de KPIs, estas herramientas han ayudado a asegurar entregas puntuales de equipos, optimizar tiempos de tránsito y cumplir rigorosamente los plazos de despliegue y repliegue. También permiten a los funcionarios electorales supervisar de manera efectiva el desempeño del personal, identificar cuellos de botella en tiempo real y tomar decisiones basadas en datos. De esta forma, se simplifican aún más las complejidades logísticas inherentes a la gestión de elecciones a nivel nacional.

Los ePoll-books o cuadernos electrónicos son de gran valor para las OAE, especialmente en el contexto de elecciones a gran escala, donde supervisar cada aspecto de las operaciones resulta una tarea inmensa. Estos dispositivos vienen con instrucciones fáciles de seguir, disminuyendo así la dependencia de la capacitación de los trabajadores electorales a la hora de garantizar operaciones exitosas. Los cuadernos electrónicos también generan datos en tiempo real durante las elecciones, proporcionando visibilidad de las operaciones en campo para asegurar que la jornada se desarrolle sin inconvenientes. Funcionando como un sistema de monitoreo para las OAE, los cuadernos electrónicos alertan sobre incidentes al instante, permitiendo así una intervención y resolución oportuna. Adicionalmente, estos dispositivos pueden facilitar tareas críticas como la autenticación precisa de votantes y la transmisión de resultados.

El uso de inteligencia artificial en logística y operaciones electorales se está expandiendo a medida que las OAE buscan mejorar la toma de decisiones y simplificar las operaciones. La IA puede proporcionar a los administradores información más profunda de forma frecuente y detallada, transformando la información en una herramienta vital para predecir tendencias y ser más eficientes. Los algoritmos de IA también pueden ayudar a analizar datos pasados, patrones de pedidos y características del producto para determinar configuraciones y procesos de almacenamiento eficientes, optimizando así el flujo de materiales necesarios para las elecciones.

La tecnología está demostrando ser un aliado crítico en la modernización electoral, mejorando cada aspecto de las elecciones, desde la planificación y logística hasta la ejecución y análisis. A medida que las OAE integran estas herramientas de manera más profunda en sus procesos electorales, están pavimentando el camino hacia elecciones que no solo son mejor gestionadas, sino que además son más transparentes y eficientes.

Antonio Mugica, experto en elecciones con experiencia en más de 35 países y CEO de Smartmatic, compara a los funcionarios electorales con directores de orquesta: “a pesar de que sean quienes sostienen la batuta y marcan el pulso, el éxito depende del esfuerzo coordinado de muchos actores”. Gracias a las herramientas tecnológicas disponibles hoy día, la batuta de las OAE está ganando un poder sin precedentes.

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