Quienes siguen los mundiales de fútbol saben que los árbitros han sido el foco de atención con ‘demasiada’ frecuencia. Eventos como la famosa “mano de Dios” del mundial México 86 o el “gol fantasma” de Frank Lampard contra Alemania en 2010, nos recuerdan que las controversias arbitrales eran una constante en los mundiales. Afortunadamente, la implementación de tecnología innovadora ha disminuido de forma importante la dependencia de juicios subjetivos hechos al calor del momento. Los árbitros han encontrado en las nuevas tecnologías un aliado para recibir evidencia objetiva y en tiempo real para tomar decisiones más precisas.

Esto, precisamente, es lo que una Copa del Mundo y las elecciones tienen en común. Además de atraer la atención del mundo entero, cada vez con mayor frecuencia están utilizando tecnologías innovadoras que mejoran la exactitud, la rapidez y la transparencia en la toma de decisiones. Demos un vistazo a las innovaciones que transformaron al evento deportivo más grande del planeta.

La tecnología en la Copa del Mundo comienza con su principal actor, el balón. En Catar 2022, el balón Al Rihla, fabricado por Adidas, tenía sensores de movimiento en su interior para informar la ubicación de la pelota a una velocidad de 500 veces por segundo. Estos datos eran transmitidos en tiempo real a los jueces de línea y oficiales, ayudándolos a tomar mejores decisiones con mayor rapidez. En caso de que sean cuestionados, ambos tipos de árbitros –de fútbol o electorales– ahora tienen datos para respaldar sus decisiones.

La información recopilada con el balón también ayudó a detectar hasta el más leve de los toques hecho por cualquier jugador. Esta información mejoró la calidad y la velocidad en la toma de decisiones de los árbitros asistentes de video (VAR). Algunos fanáticos no están convencidos con el VAR ya que, según ellos, ralentiza el juego. Sin embargo, a otros les gusta porque demuestra la calidad de los árbitros y comprueba que había que hacer algo para que el fútbol fuera más justo.

En Catar 2022, el VAR empleaba 12 cámaras colocadas dentro del techo del estadio para rastrear la pelota y los jugadores. Así, se recopilan hasta 29 puntos de datos de cada jugador, 50 veces por segundo, para ubicar su posición exacta en el campo. Los 29 puntos de datos incluyen las extremidades, manos y pies de los jugadores.

La información recabada por todos estos sensores alimenta un sistema de inteligencia artificial que ayudó a los árbitros a sentenciar con precisión jugadas claves como los penaltis o los fuera de juego. Alertas automáticas se generan dentro de una sala de operaciones de video, lo que permite a los asistentes del VAR validar la información antes de informar al árbitro.

Los fanáticos del fútbol y los votantes a menudo se hacen las mismas preguntas: ¿los árbitros son buenos? Si lo son, entonces ¿realmente necesitan tecnología? Sí, tanto los oficiales de fútbol como los electorales son excelentes. Y sí, la tecnología es necesaria.

De acuerdo a premierleague.com, antes de que se introdujera el VAR en la Premier League durante la temporada 2018/19, el porcentaje de decisiones correctas en los partidos era del 82 %. Después de usar VAR durante toda la temporada 2109/20, las decisiones correctas en los partidos aumentaron al 94 %.

De manera similar, se ha demostrado que la tecnología electoral mejora la precisión sobre el conteo humano. Un experimento que condujo la Universidad de Rice en Estados Unidos, en el que los participantes contaron a mano solo 120 boletas fue preciso solo el 58% de las veces. Imagínese multiplicar el número de papeletas contadas por 100 o 1.000 o 100.000. Otros estudios han generado resultados similares.

La tecnología electoral, por otro lado, ha demostrado, una y otra vez, ser exacta. En Filipinas, por ejemplo, una auditoría independiente demostró que las máquinas de conteo de votos de Smartmatic eran exactas. Una auditoría de las papeletas de las elecciones de mayo de 2022 coincidió en 99,95 % con el resultado electrónico. Auditorías realizadas a todas las elecciones automatizadas en Filipinas han arrojado resultados similares desde 2010, cuando se implementó la tecnología por primera vez.

La tecnología también se utilizó fuera de la cancha durante la Copa del Mundo. Los centros de seguridad y control utilizaron más de 15.000 cámaras ubicadas dentro y alrededor de los estadios para rastrear los movimientos de las personas durante el torneo. Las cámaras estaban repartidas entre los ocho estadios.

El Estadio Lusail, donde se jugó la final, implementó tecnología de reconocimiento facial para rastrear a los fanáticos, según reveló la cadena Al Jazeera. Se utilizaron algoritmos para mantener el orden en el estadio de 80.000 asientos. El centro de monitoreo pronosticó patrones de multitudes utilizando algoritmos basados en múltiples flujos de datos, incluida la venta de boletos y los flujos de tráfico en los puntos de entrada del estadio.

Del mismo modo, los funcionarios electorales en muchos lugares del mundo utilizan la tecnología en diferentes fases de una elección, incluyendo actividades importantes como el diseño de los centros de votación hasta la logística de despliegue y la gestión del tráfico de votantes el día de la elección. Con esto procuran mejorar la eficiencia operativa, ofrecer un mejor servicio, acortar las filas y garantizar una buena experiencia de votación para los electores.

Independientemente de a qué contendiente de la Copa del Mundo apoyas, recuerda que los árbitros están haciendo un trabajo duro y solo buscan que haya un resultado justo e imparcial. Lo mismo ocurre con las elecciones.

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